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Dec. 2nd, 2008 01:40 pm![[personal profile]](https://www.dreamwidth.org/img/silk/identity/user.png)
Título: Debilidad Título: Herida Miranda trata de ordenar su mente, reparando sus recuerdos que están mezclados y fundidos entre sí. Ante ella, los botones y confites de colores brillantes, se mezclan. Los ha dejado caer, junto con el saco que estaba bordando. Las manos le tiemblan, el mundo también. El Conde se ha ido, todavía acongojado. Ella no sabe cómo consolarle. Lleva poco tiempo entre ellos (Rhode decía que el amor de su familia daba entendimiento combinado con aceptación, como recompensa a la cantidad invertida según el calendario), pero siente enormes deseos de muerte, provocados por la ineptitud.
Reto: Tabla inspirada. 07.Your guardian angel/Jumpsuit Apparatus
Fandom: Death note.
Personajes/Pareja: Jealous/Misa, Rem.
Rating: T.
Resumen: DEBÍA salvarla.
Advertencia: Bizarro (?) Pero el personaje se presta para ello, so…
Fragmento: ¿Qué ves en ella? Es como cualquier otro mortal. No veo nada fuera de lo normal. Jealous, ¿has comido de esos dulces que preparan los humanos? Tal vez te ha hecho daño.
Porque es Misa, su Misa, no hay otra explicación posible para que le cautive a ese punto. Jealous no ha perdido por completo la razón: sabe que aquel ser al que observa día tras día, es humano. Misa Amane era al principio un punto de luz latiendo en el medio del espacio, distinguiéndose entre todos los demás por su claridad. Ante la más mínima perspectiva de que fuese apagada, Jealous temblaba, se estremecía y sus ojos de cal se llenaban de lágrimas.
-¿Qué ves en ella? Es como cualquier otro mortal. No veo nada fuera de lo normal. Jealous, ¿has comido de esos dulces que preparan los humanos? Tal vez te ha hecho daño.
-Mi corazón se sacude de gozo ante su presencia, hermana mía.-Pronunció nasalmente, casi convulsionándose de emoción.
Un aire tibio se escapó de entre los agujeros de su cráneo. Rem suspiró (o al menos, contuvo lo que en un ser humano hubiese pasado por ese gesto y no lo expresó por ignorancia. Demasiados siglos sin necesidad de ello) y avanzó a zancadas hasta alejarse un par de metros, para ver jugar a Shidoh y Ryuuk.
Misa es a penas un fuego fatuo que ilumina cada día a su alrededor. Sus padres le dan todo lo que pide y sus hermanas, más que envidiarla, le tienen pena por su enorme inocencia.
Todos los días le pide al Ángel de su guarda que proteja a su familia, que son sol, luna y etcétera, todos orbitando a su alrededor.
Jealous no hace nada al respecto cuando sus padres son asesinados. Bueno, en realidad solloza, se muerde el puño y odia para adentro, cada tanto lanzando gemidos agonizantes al cielo. Pero eso no detiene veinticinco puñaladas distribuidas sobre los cuerpos narcotizados de dos actores under.
Misa es un secreto. No le ha dicho más que a Rem. Desea tomarla por esposa, robarla del mundo mortal. Pero está al tanto de que esa descolorida existencia no le sentaría bien. En cierta forma, lo agradece. Misa espera demasiado del ser humano. No ve su propia luz y belleza. Está consciente sólo a medias y lo usa como juguete, ignorando que es un arma de doble filo y que atenta contra su seguridad (moral y física). No entiende que deambular a altas horas, pudiere costarle la vida (en cierta forma, eso busca, tal vez, pero es una sugerencia apelmazada de Rem). Jealus grita/llora, alargando sus brazos fantasmales, esqueléticos, hacia su imagen esfumada.
Al final, decide tomar una decisión. Mientras que Rem juega a aventar huevos con Shidoh, se mete en la cabina telefónica, abandonada y llena de arañas muertas. En el interior de la misma, se despoja de su túnica negra y deja que emerja el símbolo rojo y amarillo sobre su pecho: la “J” con la que comienza su heroíco nombre.
De todas las cosas hermosas y bizarras que Misa había contemplado desde su primer abrir de ojos, Jealous en capa roja era la más interesante y erótica de todas.
No le costó demasiado dejarse llevar por sus emociones, abrazar ese cuello corto que temblaba debajo del cráneo pétreo y mirar en los ojos de su salvador, encontrando el mayor resguardo. Todo tras escribir el nombre del asesino, ante la mirada atónita de Rem.
-Ya te lo he dicho, el amor puede todo, hermana.
De más está decir que ya era polvo, el desgraciado.
Reto: Tabla de helados. 27.Chispas de colores.
Fandom: D-gray man.
Personajes/Pareja: Rhode/Miranda.
Rating: NC-17.
Resumen: Universo Alterno en el que Miranda es Noé y no Exorcista.Tras la muerte de Rhode.
Advertencia: No creo que esté OC, pero eso depende de qué tan permisivo seas con lo que respecta a los U.a.
Nota: Pensé en hacerlo multicapítulos/serie de drabbles a manera de, pero por el momento tengo esto y ya veré si sigo o no con el fandom.
Fragmento: La primera fotografía es de ellas, en el pueblo natal de Miranda. Noches después de que comenzaran los sucesos y sólo quedara un extenso páramo vacío, en el lugar donde la encontró.
Fotografías colgadas en la pared de
Porque ya no importan los dulces que se derriten, ni las chaquetas arruinadas, porque ya no los comerán juntas y a Miranda Lotte le da bastante igual que Ticky Mick no tenga un traje decente para ir a divertirse los sábados en la noche, si al fin y al cabo lo hacía por Rhode, para complacerle en la aceptación de su familia. Que se la zurza él mismo, si tanto le interesa, porque ahora baja un río por sus mejillas y el latido entre sus muslos es insoportable.
***
La primera fotografía es de ellas, en el pueblo natal de Miranda.
Noches después de que comenzaran los sucesos y sólo quedara un extenso páramo vacío, en el lugar donde la encontró.
***
Abrió los ojos, todavía aturdida por el dolor en su frente: ante ella, una niña pequeña y menuda, como una gran muñeca, despeinada y desgarbada. Su piel era muy morena, sus cabellos demasiado oscuros y su sonrisa realmente pronunciada, como si estuviera a punto de jugarle una broma que le causaría gran placer. Entre sus dedos-que parecían garras de princesa bien cuidada-una bolsa de papel celofán con dulces de colores en su interior. Que brillaban haciendo muecas, como si estuvieran vivos y supieran qué fin tendrían. Algo en ellos la llenó de pena y al mismo tiempo, experimentó una suerte de alegría en saber que por primera vez en largo tiempo, era ella la que estaba en posición de hacer daño y no al revés.
***
En esa habitación, el sol da desde frente y quema su espalda. Recuerda el primer contacto con aquellas manos de uñas cortas, pintadas de rosado. Adentro. Lágrimas que empiezan a rodarle por la mejilla. Más adentro. El calor que exhala su cuerpo parece llegar hasta los dulces, porque han comenzado a derretirse o es acaso por el sol o están también tristes, porque ya nunca serán sus almas desposeídas, destrozadas por hermosos dientes afilados para la ocasión.
***
Estaba sola aquí. Era la noche del 31 de Octubre y me había disfrazado como una bruja, a pesar de que tuve que coser con mis propias manos la prenda y no quedaba bien. Soy torpe y en las últimas horas, las pesadillas no me dejaban en paz. Luego se fueron a pedir dulces sin mí, aunque les rogué que no lo hicieran. Me dejaron sola y todo comenzó a doler…
***
Está sólo ella y ese cuarto es de Rhode, el lugar en el que le dieran sitio desde el primer día. Un almohadón negro, lustroso, encima de la falda del largo vestido gris que copia al estilo de de la bruja llorona que una vez arribó allí. Son sólo meses más tarde, pero ha crecido diez centímetros, de golpe. La fotografía, anteriormente le daba ternura por sí misma, cuando no le avergonzaba y la escondía bajo la cama (y a la mañana siguiente de regresar Rhode, estaba de nuevo colgada, porque “A mí me gusta verte ahí, así que basta,son mis recuerdos, bruja boba, no los desprecies o comeré tu hígado con pan azucarado” y le perseguía con un tenedor y acababan haciendo el amor entre grititos que pedían auxilio en broma), pero ahora, al borde del orgasmo, le parece un chiste hiriente, viejo, que ha perdido su gracia y significación con el tiempo.