Anotador Inútil

[thanatos_bride]

Fandom: No peca de Original.
Rating: T
Resumen: Temía inclinarse demasiado pronunciadamente y correr la misma suerte que ese joven Inquisidor.
Género: Fantasía.
Tema: 1)Regret..

Anotador inútil

Se inclinó sobre las ruinas de la escalera derruida, cayó y el golpe en la cabeza le costó la vida. El Bibliotecario maldijo su suerte. ¿Simplemente había vuelto por ese manojo de hojas sueltas? Era soberbiamente ridículo.

Calculó melancólicamente unos ocho metros entre él y ese cuerpo despojado de una vida trabajosa y sin provecho.

El Universo tiene sus reglas y más allá de que la Biblioteca tenga más libertad (al ser un Universo en sí, contenedor del primero, pero también un segundo) al seguirlas, la gravedad suele ser una de las más rigurosas.

Bajó pisando los escombros con cuidado. En el aire, el polvo ancestral se metió por sus fosas nasales al respirar, agitado como estaba, por la tarea. No se veía obligado a hacer esos esfuerzos físicos desde que era un adolescente.

Temía inclinarse demasiado pronunciadamente y correr la misma suerte que ese joven Inquisidor. Al subirse las gafas, limpias gracias a un pañuelo bordado por su esposa años atrás, pudo constatar que el color de sus vestiduras era rojo sanguinolento: Aprendiz de Inquisidor, mejor dicho.

Su cuerpo era el usual para los que destacaban en la profesión y que su destino fuese trágico no era más que fatalidad. Probablemente no calculó dónde ponía su último paso y… suspiró. Él también era un Hombre de Libros y había visto más de una muerte a lo largo de su trayectoria en el oficio. No estaba familiarizado con la muerte, más allá de los ejemplares centrados en ficción, la Historia Antigua y la Biología. En Astronomía, sobre todo estrellas consumidas, pero era realmente desalentador que una persona tan joven…

Un sonido, similar a un quejido, cortó su hilo de pensamientos inconexos. ¿El Aprendiz aún vivía?

-¡Por Borges, muchacho!-Dos pasos más, acomodarse las lentillas y calcular una posibilidad para ayudarle a ponerse de pie, si es que sus miembros no estaban quebrados. Tos, sacudiendo ese torso huesudo, haciendo arquear una espalda de afilados omóplatos.

Tal vez se había mordido la lengua, porque sólo atinó a responder un sollozo ahogado, cargado de frustración.

***

Me dolía la cabeza, pero tenía la esperanza de haber perdido de vista el símbolo prohibido.

***

El anciano se arriesgaba al bajar por él y posaba los dedos largos, tibios, contra sus hombros. No era tan viejo, pero el sustantivo parecía ser adecuado.

Luego se desvaneció el mundo y cuando regresó la consistencia de la realidad, estaba tomando un baño, seguramente en su depacho.

Su corazón casi colapsa al caer en la cuenta de que algunas hojas pertenecientes a su manuscrito, nadaban sobre el agua caliente, derritiéndose la tinta en la que plasmara sus ideas.